La implementación del Acuerdo de Paz firmado entre el Gobierno de Colombia y la extinta guerrilla de las FARC-EP, supuso para la población excombatiente el reto de incursionar en actividades económicas, en la mayoría de los casos sin contar con experiencia ni competencias acordes a los requerimientos de una nueva realidad. Adicional a ello, algunos de los territorios en los que se establecieron, como Guaviare, golpeados por diversos conflictos durante décadas, han permanecido alejados de los circuitos comerciales y productivos y muchos de sus potenciales endógenos están aún por desarrollarse.

Conscientes de la oportunidad de negocio en torno a la biodiversidad de Guaviare, algunos firmantes de paz indígenas que iniciaron su proceso de reincorporación en el antiguo ETCR Marco Aurelio Buendía, ubicado en la vereda Charras, propusieron una iniciativa relacionada con la conservación del medio ambiente y con el ecoturismo “como práctica de reconciliación con el entorno natural”. Así, un grupo de 15 firmantes integrantes de la Cooperativa Multiactiva Ecomun Agroecológica Campesina de Guaviare – CAMPOGUAVIARE, se organizó para poner en marcha en 2018 la iniciativa Maravillas de la Naturaleza, MANATÚ, con el fin de ofrecer servicios de turismo vivencial en torno a la naturaleza. Las primeras inversiones se hicieron con los ocho millones de pesos entregados por el Gobierno a cada firmante para poner en marcha proyectos productivos. Posteriormente contaron con el acompañamiento de la OIM (Organización Internacional de las Migraciones) quienes apoyaron con asistencia técnica, administrativa y para el diseño y costeo del producto turístico, y con la construcción de las primeras infraestructuras y la obtención del registro como prestadores de servicios turísticos.

En el 2021 el proyecto Caminemos Territorios Sostenibles se suma a la iniciativa de MANATÚ, apoyando la propuesta presentada por los propios firmantes al Fondo Concursable Comunitario creado por el proyecto, para culminar su iniciativa productiva. Con el apoyo financiero recibido contrataron mano de obra cualificada y compraron los materiales necesarios para completar la infraestructura turística básica, contando en la actualidad con siete habitaciones, cabaña social, cabaña de servicios (bodega, cocina y lavandería) y batería sanitaria. Caminemos apoyó también con una planta potabilizadora de agua, y con acompañamiento técnico para la prestación de Firmantes avanzan en su reincorporación económica ofreciendo servicios para visitantes en Guaviare 13 servicios. Las instalaciones tienen capacidad para hospedar a 26 personas, entre habitaciones en cabañas y camping, estando en condiciones de ofrecer un servicio de calidad, tal como refiere uno de los líderes del antiguo ETCR

“Además de la infraestructura, que es única y, muy bien equipada, el proyecto enseñó cómo organizar las habitaciones, y así se ofrece un alojamiento de otro nivel que no existe en la región”.

MANATÚ inició su operación en agosto de 2022, pero con un importante desconocimiento del funcionamiento del sector, encontrándose con que los operadores turísticos pagan los servicios con meses de retraso, situación insostenible para una iniciativa que había destinado todo su capital a dejar listas las instalaciones para empezar a operar. Esta circunstancia paralizó la operación turística y los integrantes de MANATÚ se abocaron a capacitarse en aspectos relacionados con la prestación de servicios de turismo de naturaleza y a integrarse en proyectos de preservación del medio amazónico, como la iniciativa Corredor del Jaguar, financiada por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial. De esta forma surgió un nuevo nicho de mercado que han sabido aprovechar: el institucional. En el último año han brindado hospedaje, alimentación y espacio para eventos en 18 oportunidades, teniendo como clientes a agencias de cooperación como PNUD y WWF y a instituciones de educación superior como la Facultad de Biología de la Universidad Javeriana y la Universidad de Sydney (Australia), recibiendo estudiantes en prácticas con una periodicidad trimestral. Estas actividades les han dado a conocer y ya se han acercado a ellos otras universidades, como la Universidad de Medellín y la UNIMINUTO, para llevar a sus estudiantes de ciencias de la naturaleza a realizar sus prácticas.

Con los grupos de estudiantes, además de hospedaje y alimentación, prestan sus servicios como guías locales o baquianos, basados en sus conocimientos empíricos de la naturaleza y en una realidad vivida como indígenas, compartiendo la “narrativa de la selva que han construido desde el conocimiento ancestral y que han complementado con la vida en la insurgencia”; a la vez, retroalimentan estos conocimientos con los de los estudiantes que reciben. Cabe mencionar que los operadores turísticos del departamento también han empezado a mostrar interés por los servicios de guianza que ofrecen.

Con la operación que tienen, hasta el momento se emplean seis personas para las labores de cocina, aseo, mantenimiento y atención a visitantes, y cuando tienen eventos de más de 40 participantes, contratan temporalmente entre 5 y 6 personas. Para mejorar la rentabilidad de la iniciativa y dar mayor valor a sus servicios, cultivan muchos de los alimentos que se ofrecen en el restaurante, y otros los compran en las comunidades vecinas.

A la par de sus actividades, los integrantes de MANATÚ se han ido capacitando, contando ya con un técnico en administración, un técnico en agencias de viajes, un técnico en turismo rural y un técnico en guianza turística. Su prioridad ahora es seguir capacitándose en temas de naturaleza para ofrecer nuevos servicios, como avistamiento de aves, y para generar dinámicas que integren a las familias de las comunidades vecinas, algunas de las cuales ya colaboran con MANATÚ ofreciendo productos, como el avistamiento de venados y tapires en sus fincas.

En definitiva, MANATÚ es una iniciativa productiva que va superando sus primeras dificultades con solvencia, gracias a la firme voluntad de sus integrantes, quienes están convencidos de su potencial, máxime cuando el turismo es una de las apuestas económicas priorizadas en el departamento de Guaviare.

Esta reseña de caso, que contribuye al Pilar 2 del Fondo Europeo para la Paz: Reincorporación de exintegrantes de las FARC-EP a la vida civil en lo económico y lo social, fue publicada en el XIX Informe de seguimiento del Fondo Europeo para la Paz (julio – septiembre de 2023), y refleja algunos de los logros del proyecto Caminemos Territorios Sostenibles, ejecutado por la ONF Internacional, en consorcio con Alquería, la Fundación Éxito, Acción Contra el Hambre (ACH) y la Gobernación de Guaviare. El texto está basado en documentación facilitada por el proyecto y en entrevistas a miembros de su equipo y a actores clave del proceso, algunos de cuyos testimonios se recogen en cursiva.

Sobre el Fondo Europeo para la Paz

El Fondo Europeo para la Paz es un mecanismo de cooperación de la Unión Europea creado para acompañar al gobierno colombiano en la implementación del Acuerdo de Paz, con énfasis en el Punto 1 de Desarrollo Rural Integral y Punto 3 en lo que concierne a la reincorporación de la población excombatiente de las FARC-EP a la vida civil. En el marco del Fondo se han puesto en marcha 31 intervenciones mediante las cuales se pretende contribuir a la reconciliación de la sociedad colombiana, a la reincorporación social y económica de excombatientes, a la equidad de género y la inclusión de sectores vulnerables de la población, al desarrollo rural sostenible e incluyente, y a la presencia legitimadora de Estado y la gobernanza local. La cobertura geográfica de las diferentes acciones del Fondo abarca 26 departamentos y 181 municipios del país.