En esta semana denominada Nuquí Construye Paz, 20 jóvenes afros e indígenas, pintaron un hermoso mural frente al parque principal de Nuquí, en Chocó, Colombia. Se trata de hombres y mujeres jóvenes del Litoral Pacífico, pertenecientes a la Institución Educativa Ecoturística Litoral Pacífico, y el Centro Educativo Indígena Phusabidará.
Los facilitadores, el muralista Oscar González, conocido como Guache, y el fotógrafo y muralista Ricardo Torres, son dos artistas urbanos de la ciudad de Bogotá, que fueron invitados por el Fondo Europeo para la Paz en Colombia, para acompañar esta semana por la Paz el trabajo de reconstrucción de tejido social con jóvenes.
Esta actividad se desarrolló en el marco de la semana “Nuquí construyendo Paz”.
Con un taller de sensibilización del muralismo como una herramienta de transformación simbólica y social, los jóvenes emprendieron un viaje a través de ejemplos de pinturas mural, desde la antigüedad, pasando por el muralismo indígena latinoamericano, y el muralismo político mexicano, hasta el movimiento contemporáneo del mural, influenciado por el diseño, el grafiti y el arte urbano.
El muralismo, como lo conciben los dos artistas, es una herramienta colectiva para tratar temas de interés social, para la reconciliación y la reconstrucción del tejido social. Con ella los jóvenes tomaron apropiación del espacio, de su imagen y de la comunicación de sus mensajes de paz; en especial tratándose de jóvenes que han sido víctimas de la violencia de manera directa o indirecta.
El mural es una creación conjunta, en que los jóvenes, a partir de diferentes ideas, trabajaron sus propios bocetos, para luego modelarlos en fotografías, con las que hicieron la composición de la que son los protagonistas, tanto de la imagen, como de su ejecución. Para esta región del Norte del Chocó, este ejercicio entre las dos etnias presentes en el territorio, coadyuva en la construcción desde la población joven de una visión colectiva del territorio, la cual se plasma para la vista de todos como un manifiesto de unidad.
El mural fue una construcción colectiva por parte de jóvenes afro e indígenas, para comunicar su mensaje de paz y reconciliación en el municipio.
El resultado final acompaña desde ahora el parque con un mensaje de unidad y de orgullo por la identidad de sus habitantes interétnicos.
El proyecto Fronteras de Selva y Mar Para la Paz, del #FondoEuropeoparalaPaz es ejecutado por el Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico IIAP y cofinanciado por las alcaldías de Nuquí, Bahía Solano y Juradó.