En el departamento de Nariño, de manera similar a otros territorios del país y principalmente en las áreas rurales, muchos jóvenes que cursan los últimos grados de la educación básica enfrentan diversas barreras para continuar sus estudios y limitadas oportunidades laborales. A su vez, los establecimientos educativos no cuentan con herramientas didácticas ni ambientes escolares apropiados que contribuyan a conectarles con el entorno y desarrollar iniciativas desde sus propios intereses y necesidades.
Ante esta problemática el Proyecto de Desarrollo Territorial en Nariño (PDT Nariño) ha acompañado durante los últimos años al sector educativo, principalmente del municipio de Pasto, en el proceso de adoptar nuevas metodologías que promuevan en las y los estudiantes habilidades y competencias básicas ciudadanas y laborales, así como actitudes emprendedoras. En concreto, se han contextualizado y/o validado cuatro metodologías acordes a los diferentes niveles educativos, destacándose en esta reseña la denominada Jóvenes Emprendedores Sociales (JES), dirigida principalmente a estudiantes de grados 9°, 10° y 11° e implementada en 33 establecimientos educativos rurales y urbanos de Pasto y otros municipios del departamento. Uno de los supuestos de JES es que fortalecer capacidades para emprender en las y los estudiantes puede transformar sus contextos, y para ello se promueven actividades para desarrollar la creatividad, la planificación, el liderazgo, la comunicación efectiva, resolución pacífica de conflictos, y la visión de futuro y materialización de proyectos, entre otros aspectos.
A modo de aplicación práctica de estos aprendizajes, durante la implementación de JES los equipos docentes, formados también en emprendimiento, acompañaron a sus estudiantes en la creación de 29 ONG pedagógicas, entendidas como iniciativas emprendedoras enfocadas a abordar con una mirada solidaria, el potencial de sus territorios y el arraigo a la tierra puestos en relación con temas socioeconómicos, culturales y ambientales; a su vez, con el apoyo del PDT Nariño se facilitaron herramientas, equipos y materiales para la implementación de los proyectos formulados en el marco de estas iniciativas emprendedoras. Las preocupaciones e intereses del alumnado se enfocan en temáticas como la contaminación originada por la industria textil, el deterioro del medioambiente o la pérdida paulatina en la juventud de la identidad y la cultura propia, entre otras.
En palabras de uno de los estudiantes participantes, “lo valioso fue la oportunidad Jóvenes nariñenses emprendedores y agentes de cambio en su territorio 18 de decidir qué hacer e implementarlo. Si las clases de emprendimiento se hubieran quedado solamente en la parte teórica y normativa no se hubiera realizado nada de lo que hicimos”.
Los estudiantes manifiestan que su participación en JES generó cambios en su mentalidad y actitud ante el emprendimiento, mejorando sus habilidades para la oratoria y la defensa de sus propuestas en público, su capacidad para dialogar y llegar a consensos, para vender productos, llevar la contabilidad y ahorrar e invertir en la iniciativa. Estos aprendizajes les han llevado a pasar de ser estudiantes pasivos, y en muchos casos desmotivados, a invertir tiempo extracurricular para sacar adelante sus iniciativas.
Un joven participante en JES comenta “mi mayor aprendizaje fue entender que los estudiantes podemos ser parte del cambio; con lo que tenemos y metiéndole la ficha podemos lograr transformaciones”.
En las ONG pedagógicas las y los estudiantes aprendieron a planear, ejecutar y generar recursos con sus iniciativas, a la vez que aportaban soluciones a alguna problemática social o medioambiental de la comunidad. Concluida la etapa escolar, estos aprendizajes se han incorporado en los proyectos generadores de ingresos, colectivos o individuales, que algunas(os) estudiantes participantes en JES han puesto en marcha. Destaca el caso de la iniciativa del colectivo Urkunina, que actualmente está generando ingresos para sus integrantes, mediante la elaboración y venta de chicha y postres a base de frutas autóctonas. Este colectivo proviene de la ONG pedagógica “Jóvenes Emprendedores del Corredor Oriental” (JECO), focalizada en la desconexión de la juventud rural de Pasto de las tradiciones y costumbres locales, que llevó a cabo diferentes iniciativas para revalorizar su patrimonio cultural.
Uno de sus integrantes señala que “nos dimos cuenta del estigma de ser pastuso y decidimos apropiarnos de nuestras costumbres como el uso de la ruana, nuestro acento, y valorar los cultivos como las papas nativas o las frutas”. Asimismo, otra de las integrantes de Urkunina ha llevado la experiencia de JECO al negocio familiar de restauración, mejorando y ampliando la oferta gastronómica con bebidas y platos tradicionales.
En el plano individual, resalta el caso de un estudiante que con los aprendizajes de su participación en JES, ha incluido mejoras en su sistema de enseñanza de música y matemáticas, observando una aceleración en el proceso de sus estudiantes, y ha diseñado un plan de acción que le permite generar más ingresos con su actividad docente.
Hacer transferencia de los aprendizajes y ser mentores de las nuevas generaciones, es otra de las acciones llevadas a cabo por quienes formaron parte de las ONG pedagógicas, contribuyendo a la sostenibilidad de las iniciativas emprendidas. Es el caso de algunos integrantes de la ONG “Sueños Verdes”, que construyeron huertas y reforestaron los alrededores del colegio, y continúan vinculados a la iniciativa, enseñando y motivando a las y los estudiantes activos, para su mantenimiento y ampliación. En una línea similar, la ONG JECO realizó un evento de entrega de su iniciativa a las nuevas generaciones del colegio para darle continuidad.
En síntesis, la metodología JES, y la educación emprendedora en general, se posiciona como una práctica transformadora en la educación de las y los jóvenes, dotándoles de mejores herramientas para enfrentar con éxito los desafíos que supone ser joven en áreas rurales con pocas oportunidades de desarrollo personal y laboral.
Esta reseña de caso, que contribuye al Pilar 3 del Fondo Europeo para la Paz: Inclusión poblacional: jóvenes, mujeres y grupos étnicos, fue publicada en el XVIII Informe de seguimiento del Fondo Europeo para la Paz (abril – junio de 2023), y refleja algunos de los logros del proyecto PDT Nariño, ejecutado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo – AECID, en consorcio con Red Adelco, la Gobernación de Nariño, y las Alcaldías de Pasto, Ipiales y Tumaco. El texto está basado en documentación facilitada por el proyecto y en entrevistas a miembros de su equipo y a actores clave del proceso, algunos de cuyos testimonios se recogen en cursiva.
Sobre el Fondo Europeo para la Paz
El Fondo Europeo para la Paz es un mecanismo de cooperación de la Unión Europea creado para acompañar al gobierno colombiano en la implementación del Acuerdo de Paz, con énfasis en el Punto 1 de Desarrollo Rural Integral y Punto 3 en lo que concierne a la reincorporación de la población excombatiente de las FARC-EP a la vida civil. En el marco del Fondo se han puesto en marcha 31 intervenciones mediante las cuales se pretende contribuir a la reconciliación de la sociedad colombiana, a la reincorporación social y económica de excombatientes, a la equidad de género y la inclusión de sectores vulnerables de la población, al desarrollo rural sostenible e incluyente, y a la presencia legitimadora de Estado y la gobernanza local. La cobertura geográfica de las diferentes acciones del Fondo abarca 26 departamentos y 181 municipios del país.